Ayer, 30 de marzo, se celebró el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, ocasión idónea para reivindicar los derechos de las y los trabajadores domésticos y darnos cuenta de lo que aún nos falta por avanzar como sociedad.
El trabajo doméstico es el trabajo realizado en un hogar, incluidas las tareas domésticas, el cuidado de niños y otros cuidados personales. Hay que hacer hincapié en la diferencia entre el trabajo doméstico remunerado y el no remunerado. Este último es por el cual se lucha para que sea reconocido, y para colocar en la agenda pública su situación de discriminación laboral y llamar la atención ante la indiferencia social. Es un sector que sigue siendo infravalorado e invisible ante los ojos de la sociedad.
¡Hoy celebramos el día internacional de las Trabajadoras del Hogar!
Las trabajadoras domésticas son el sector más vulnerable y constituyen gran parte del trabajo informal o subsidiario. Gran parte de las trabajadoras son inmigrantes o forman parte de comunidades desfavorecidas, en busca de un mejor futuro o de algo que llevarse a la boca.
En 1988, en Bogotá, Colombia, en el primer Congreso de Trabajadoras del Hogar, se instauró el 30 de marzo como Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, como fecha conmemorativa y de reivindicación de los derechos de este sector laboral. Lo que se exige en primer término es su reconocimiento como trabajadoras y que tengan las mismas condiciones y derechos laborales que cualquier trabajador del resto de sectores.
Es un sector altamente feminizado ya que, el 96% de las personas dedicadas a esta actividad son mujeres, y es la única profesión que no cotiza para el desempleo, que reconoce horarios intempestivos y absoluta disponibilidad, con el Salario Mínimo Interprofesional, equivalente a 645.30€.
Con la ayuda de Interdomicilio se ha favorecido la creación de empleo, generando más de 1000 puestos de trabajo directos y 500 indirectos o de manera parcial, encargándonos de que más de 20.000 hogares cuenten con servicios a domicilio prestados por auténticos profesionales.
En Interdomicilio apostamos por dignificar, profesionalizar y regular sectores tan infravalorados como es el caso de las trabajadoras del hogar, volcando toda la confianza, calidad y seguridad de una gran empresa para que ambas partes salgan beneficiadas socialmente.