
Tal y como os adelantamos ayer, hoy os presentamos algunos consejos para prevenir enfermedades y reducir la presencia de elementos bacterianos en nuestro hogar.
¿Qué prevenciones tomar con la higiene del hogar?
- El primer consejo más fácil y útil es lavarse las manos con agua y jabón, puesto que exponemos cada superficie que tocamos a sus gérmenes. Es importante no solo lavase la palma, sino también el dorso, las zonas que están entre los dedos, incluso la muñeca.
- Es aconsejable pasar la aspiradora al menos una vez por semana en toda la casa y quitar el polvo de los muebles con una bayeta húmeda para evitar ácaros.
- Mantener en perfectas condiciones de higiene todas las superficies de la cocina. Limpiar con regularidad el fregadero, el escurreplatos y las superficies y objetos que se utilizan para cocinar. También es importante mantener la basura y los desechos lejos del lugar dónde solemos cocinar.
- Cambiar y limpiar adecuadamente elementos de limpieza como los paños de cocina, estropajos y las bayetas.
- Ventilar las habitaciones al menos diez minutos de manera que se renueve el aire del interior y se reduzca la concentración de contaminantes. De nada sirve limpiar a fondo si no hay una circulación adecuada del aire. Esta medida deberemos restringirla a horarios tempranos en primavera si los habitantes están expuestos a alergias al polen. Recuerda que habitaciones también son considerados los baños y cocina, de hecho, estos deben especialmente ventiladas debido a su continua humedad.
- Es imprescindible mantener pulcras las zonas húmedas del baño, desinfectándolas regularmente. Recuerda que la bañera, el lavabo y los aseos son zonas húmedas dónde más fácilmente puede proliferar moho y otras bacterias.
- Bajar la tapa del inodoro antes de tirar de la cisterna para evitar pulverizar los gérmenes en el baño.
- Mantener secos los objetos utilizados para la limpieza corporal como las toallas, además de las tapicerías, sofás, alfombras permanezcan secos.
- La ropa de cama debe ser cambiada periódicamente puesto que es escenario de multitud de sustancias que terminan siendo nocivas como las lágrimas, las proyecciones de la tos y los estornudos, y escamas de piel que perdemos todas las noches.
- El armario debe estar siempre ventilado, ya que es uno de los lugares favoritos de los hongos.
- Si posee equipo de aire acondicionado, debe cambiar el filtro, pues ahí suelen acumularse bacterias y nunca bloquear las entradas.