Con el ritmo de vida que llevamos hoy en día muchas veces nos es complicado mantener la casa ordenada. Esto se debe a que muchas veces no tenemos tiempo para ordenar o no lo priorizamos.
Por ello, la mejor solución es intentar mantener todo constantemente ordenado y recogido.
¿Cómo tener tu hogar ordenado?
Incorpora estos trucos en tu rutina diaria y tendrás siempre tu hogar ordenado y recogido sin apenas esfuerzo.
Trucos rutinarios que te ayudarán a mantener el orden en tu casa
- Haz la cama por la mañana. Puede parecer que hacer la cama antes de ir a trabajar es imposible, que no podemos perder tiempo en ello, pero en realidad solo cuesta hacerla un par de minutos. Mantener la cama hecha desde el punto de la mañana hará que tu habitación luzca mucho más ordenada.
- Recoge la ropa nada más te la quites. Cuando llegues a casa y te cambies de ropa no la dejes por el medio, guarda la que no sea para lavar y aparta a la zona de ropa sucia la que sí que lo sea. Hacerlo justo en el momento que te la quitas hará que luego no se te acumule el trabajo.
- No dejes los zapatos por el medio. Es muy común que en cuanto llegamos a casa nos descalzamos y dejamos los zapatos en el mismo sitio que nos los quitamos. No debes hacerlo, recogerlos inmediatamente después de quitártelos te llevará solo unos segundos y evitarás que se te acumule el desorden y mejorarás la armonía general del hogar.
- Friega los platos después de cada comida. Así evitarás que la comida se quede incrustada y después necesites más tiempo para limpiarlo. Además, harás que la cocina este siempre recogida sin apenas esfuerzo porque lo harás poco a poco y no con todo acumulado.
- Recoge la encimera después de cocinar. Es muy útil ir recogiendo los utensilios e ir tirando los residuos orgánicos que producimos mientras cocinamos. Recoger y limpiar a la vez que cocinamos hará que después sea mucho más rápido y sencillo mantener la cocina limpia y ordenada.
- Barre rápidamente el suelo de la cocina después de cada cocinado. Parece algo muy poco práctico, pero haciendo un barrido rápido después de cada comida evitarás que el polvo, migas y demás suciedad se acumule y cueste más trabajo limpiarlo.
- Recoge las cosas después de cada uso. Parece algo lógico pero muchas veces se nos olvida. Solo debemos recoger todo lo que usamos después de usarlo. Es decir, recoge el peine cuando acabes de peinarte, lo mismo con la crema corporal, el secador, la manta del sofá, los mandos, … Manteniendo esta costumbre tendrás tu hogar ordenado sin darte cuenta.
- Si algo se mancha límpialo cuanto antes. En cuanto detectes una mancha en algún rincón de tu hogar no esperes otro momento para limpiarlo, hazlo cuanto antes. Así evitarás que se te olvide y que la suciedad se quede más incrustada y cueste mucho más trabajo eliminarla.
