Limpieza de alfombras de casa ¿cómo hacerlo?

La limpieza de las alfombras de casa es algo que comúnmente no solemos solventar con facilidad. Por eso desde Interdomicilio vamos a daros unas pautas y unos trucos para que podáis limpiarlas sin ningún problema.

Las alfombras, se presentan como no solo un elemento de decoración sino como una prenda de nuestro hogar imprescindible si queremos hacer de este un lugar cálido –recuerda que el uso de alfombras es uno de los mejores trucos para ahorrar en calefacción este invierno. El inconveniente de estas, es que suelen acumular suciedad, y pueden presentarse como foco de bacterias en caso de que no realicemos la limpieza adecuada.

A continuación, te ofrecemos unos fáciles consejos que te ayudarán con esta tarea:

Trucos para limpiar las alfombras de casa

Conociendo mi alfombra

Antes de dar ningún paso en cuestión de limpieza, es imprescindible que conozcas los materiales que componen tu alfombra así como el método de limpieza que recomienda el fabricante. Pese a las recomendaciones posteriores, es posible que por la composición de esta, el resultado no sea el deseado.

Aspirar

Antes de ejecutar cualquier tipo de limpieza, es esencial aspirar la alfombra a fondo, para retirar todo el polvo. En caso de las alfombras de pelo corto, podemos aspirar en las dos direcciones. Para las alfombras de lana, es conveniente que retires el cepillo que pueda dañar o romper las fibras.

Compra los productos adecuados

Te recomendamos decantarte por productos específicos para la limpieza de alfombras en casa, siguiendo las instrucciones. Si te vas a decantar por una limpieza profesional y estas valorando el alquilar un aparato específico, opta por el vapor puesto que las que usan champú, suelen mojar las alfombras en exceso.

Testar

Ante la aplicación de cualquier producto, sea cual sea, te recomendamos que primero pruebes a ejecutar el trabajo en una pequeña parte de la alfombra, a ser posible la menos visible, si nunca antes lo hemos aplicado. Puede ahorrarnos algún que otro susto.

¿Cuál es mi tipo de alfombra? Limpieza casera de las alfombras

La limpieza en seco es suficiente, mientras no se utilice la alfombra, aunque este no suele ser la mayor parte de los casos. Tras las anteriores consideraciones, debemos preguntarnos ¿de qué tipo es nuestra alfombra?

Alfombras de pelo corto

Si cuentas con una alfombra “común” de pelo corto, puedes utilizar agua caliente, con un poco de amoniaco, que puedes esparcir con un pulverizador. Ve utilizando un cepillo y friega la superficie de manera cuidadosa. No olvides ventilar la sala.

Alfombras de lana

Para las alfombras de lana, la limpieza en seco es la técnica más adecuada. Cubre toda la alfombra con bicarbonato de sodio y deja actuar a la aplicación durante una hora. Después, pasa la aspiradora sin el cepillo.

Alfombras de pelo largo

Las alfombras de pelo largo han sido tendencia durante los últimos años y es posible que cuentes con una de estas. Cuelga la alfombra en un lugar al aire libre o en una sala que puedas ventilar perfectamente. Golpéala antes de nada para eliminar la suciedad y las partículas acumuladas. Crea una mezcla de 5/6 de agua y 1/6 de vinagre blanco, introdúcela en un bote con pulverizador y rocía la alfombra, pero ¡cuidado!, no impregnes en exceso la alfombra. Déjala secar durante unas 3 horas.

En caso de que contemos con una alfombra con mal olor, la sal común puede convertirse en nuestra gran aliada. De manera muy fácil, puedes eliminar el desagradable olor, con este producto que seguro tienes en casa. Solo tienes que esparcir la sal a lo largo y ancho de la alfombra, después, deberás enrrollarla poco a poco intentando que quede lo más compacta posible, sin espacios. En esta ocasión te tocará dejarla actuar durante un día, pero después, tendrás una alfombra totalmente renovada, sin olor, y sin humedad.

Consejos para el mantenimiento ¿Qué debo hacer en la limpieza de la alfombra?

Constancia

Pasa la aspiradora de manera regular.  Que la limpieza de esta, no pase de una vez al mes.

Limpieza a fondo

Una vez al año, limpia la alfombra a fondo, por los dos lados, evitarás la creación de ácaros y acumulación de partículas. Limpia también los radiadores y zócalos que tiene la alfombra en sus alrededores.

Cuidado con las mezclas

Hemos comentado que debes conocer cuál es la composición de materiales de la alfombra así como los productos que permite su limpieza. Pero además, tienes que saber que no debes empapar completamente la alfombra con elementos líquidos. No conseguirás limpiarla más ni mejor, sino mojarla más y que la humedad se acumule.

Frente a las manchas

Elimina lo más rápido posible  los derrames y manchas para evitar que quede rastro. Para quitar las manchas, los productos a utilizar dependerán del tipo de tejido de fabricación.  En general, el amoníaco es la mejor solución para limpiar manchas de tierra, mientras que una mezcla de alcohol y agua elimina el pegamento y los restos de azúcar. El vinagre blanco te permitirá quitar restos de sangre y el producto de lavavajillas eliminará las manchas de café y la grasa.