
El aprendizaje de un segundo idioma en niños no dificulta ni obstaculiza el aprendizaje de su lengua materna, como muchos piensan. De hecho, ayuda al desarrollo de capacidades, potencialidades y aspectos culturales, que sin esta segunda lengua tardarían más en adquirir.
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Como todos sabemos, la rapidez de aprendizaje de idiomas en los niños es mucho mayor y esto es debido a que en su propio desarrollo fisiológico, sus redes neuronales están más abiertas a conocer cosas nuevas. En la actualidad todos los padres conocen las ventajas que poseen los niños para aprender idiomas desde pequeños, aunque muchos aún se muestran reticentes a inculcar una segunda lengua desde el nacimiento por temor a retrasar o impedir el aprendizaje en la lengua materna o porque piensan que esto puede crearle confusión.
Barbara Zuer Pearson, la autora de Raising Bilingual Child, afirma que después de tan sólo días de haber nacido, todos los bebés pueden diferenciar varios idiomas, especialmente cuando se trata de idiomas muy diferentes entre sí, como pueden ser el francés y el árabe. A partir de los 6 meses, ya adquieren la habilidad de diferenciar idiomas más similares, como el inglés y el holandés.
Recientes estudios aseguran que el bilingüismo no causa deficiencias en el habla ni en la adquisición de in lenguaje, sino más bien al revés. De hecho dichos estudios certifican que sorprendentemente, los niños con retrasos en el lenguaje que crecen en ambientes bilingües adquieren el lenguaje a la misma velocidad que aquellos que lo hacen en un idioma.
La implantación de un segundo idioma en los niños de temprana edad no solo ayuda a desarrollar sus capacidades y aspectos intelectuales sino que también ayuda a fomentar los ámbitos culturales y sociales, de tal forma que el niño está involucrado en la cultura y aprende a respetar más a los demás. Por descontado quedan los beneficios con los que cuenta una persona que ha aprendido un idioma desde pequeño desde el mundo real hasta el mundo laboral.
Por ello, que los miedos amparados en las antiguas creencias no impidan que vuestros niños crezcan de la mano del bilingüismo con todas las ventajas que ello conlleva.