La mayoría conocemos el poder de los libros para despertar sentimientos y sensaciones, incentivar la curiosidad, soñar y jugar con la realidad. Nos conceden una llave para abrir puertas a otros mundos, permitiéndonos viajar atravesando el tiempo y el espacio. Son grandes herramientas para la educación de los niños, ya que educan, enseñan y entretienen. Por ello es esencial estimular la lectura desde muy pequeños.
Pero hoy en día las nuevas tecnologías, como los videojuegos, no dejan lugar para la imaginación porque todo queda explicado, de esta manera los niños se guían por la comodidad y rapidez. En este artículo te enseñamos unas sencillas pautas a seguir para que los niños se interesen por la lectura.
¿Cómo fomentar la lectura en los más pequeños?
Eres su ejemplo
Sin alguna duda, una de las mejores maneras para incentivar a los niños a leer, es viéndote a ti hacerlo, puesto que muchas veces imitan el comportamiento de sus mayores. De nada va a servir intentar inculcarle esta rutina si nos dedicamos a estar en frente del portátil o la televisión ¡Sé un buen ejemplo para él, lee!
Deja que ellos elijan la lectura
Hay que dejar al pequeño a elegir lo que desea leer, puesto que de otra manera verá la lectura como algo aburrido y posiblemente no acabará el libro. No te limites a imponerle un título, averigua cuáles son sus gustos para que así sea una actividad fascinante con la que adquirir nuevos conocimientos y conocer historias. Actúa como su guía, sugiere, enseña y comenta con él las lecturas y ten en cuenta que hay un libro ideal para cada edad, y un lector principiante necesita un texto que se ajuste a sus capacidades y sensibilidad.
Hacer de la lectura un hábito diario
Los niños necesitan pautas y reglas, para que vayan aprendiendo a organizar su tiempo. Es por esto que al principio, si es necesario, ha de dedicarse un tiempo específico cada día a leer con los niños para que así lo incluyan en su rutina y empiecen a extrañar la lectura. Posteriormente, has de motivarlo para que lo haga él solo.
No imponer la lectura como castigo
Es importante que no utilicemos la lectura como un castigo ya que lo asociarán a algo negativo, le cogerán pereza y no realizarán esta actividad por su propia voluntad y de manera independiente. La lectura ha de ser algo divertido y beneficioso para ellos.
Comenzar desde muy pequeños
Te sorprenderá saber lo que los niños entienden desde mucho antes de aprender a andar. Por eso te recomendamos empezar desde bebés. En estos primeros meses es cuando les interesa más la sonoridad que el contenido de la lectura, prestan atención a tu voz y a la entonación. Es decir, necesitan ser estimulados lo antes posible.
Leer como recompensa
Por último, leer requiere un esfuerzo por parte de los niños. Por ello, es preciso que reciban una recompensa. Debes enseñarle que leer le hará pasar un buen rato, viajar y divertirse.
Estos consejos te ayudarán a guiar a los niños por el buen camino de la lectura ¡Compártelos con tus amigos a través de Facebook, Twitter y Google+!
